El ‘Scratch’, con un Neymar que nunca ha perdido de local, saldrá a destronar a los de Vicente del Bosque.

En estos tiempos, en los que cada vez se juega menos y se corre más, una final como la de esta tarde, entre Brasil y España, era lo que nos hacía falta para confirmar que tratar bien al balón siempre será el mejor camino.
Mientras el ‘Scratch’ intenta recuperar su ‘Jogo Bonito’, la ‘Furia’ desea el único trofeo que le falta a su colección: la Copa Condeferaciones. Obvio, la responsabilidad brasileña es mayor: juegan en el Maracaná y organizarán el Mundial del próximo año.
Las estadísticas, por lo menos, están de su lado: de ocho partidos contra España, le han ganado cuatro. El último fue por 1 a 0 en México ‘86. Y, por si fuera poco, Neymar, en el que todo Brasil pone sus esperanzas, jamás ha perdido un partido con su selección jugando en casa. El ‘Gallito’ ganó 10 veces y empató las otras tres.
“Si ganamos, le enviaremos un mensaje al mundo”, declaró el DT ‘Felipao’ Scolari, quien está algo ‘cabezón’ por el estado de Paulinho: es duda por gripe.
¿Habrá ‘Maracanazo’?
El Maracaná es un estadio marcado por la tragedia futbolística. En 1950, Brasil perdió la final del Mundial ante Uruguay. Y hoy podría sufrir un golpe similar.
“Somos el Brasil del presente”, ha dicho Fernando Torres, quien es la principal carta de gol española. Por algo es el goleador del campeonato, con cinco ‘pepas’. Encima, recontra astuto, le jugó la presión al ‘Scratch’. “Nosotros tenemos más que perder que ellos, somos el rival a batir”, dijo el ‘Niño’.
Más allá del resultado, esta la final que todos soñábamos ver. Y quizá, si ambas selecciones se ‘empilan’, repitan el partidazo en el Mundial 2014.